Un blog de economía para no economistas

"Ojalá te toque vivir tiempos interesantes", reza una maldición china. Los argentinos sufrimos la maldición de vivir en una economía "interesante". Por eso tenemos que saber más de economía que en otros países.

Para enfrentar la maldición de vivir en una economía "interesante", en este blog encontrarás comentarios, análisis y estadísticas sobre la economía argentina, sin jerga económica innecesaria ni tecnicismos, con rigurosidad analítica pero simpleza en la exposición.

martes, 9 de noviembre de 2010

Por qué tenemos inflación

Este año cerraremos con una inflación de alrededor del 25% (ver “Un poco de aritmética inflacionaria”). No es producto de la existencia de “sectores concentrados” de la economía, ni de formadores de precios irresponsables, ni de falta de inversión (aunque es cierto que necesitamos más inversión). Es consecuencia de la política económica de los últimos 5 años.
Como expliqué en un post anterior (ver “Cómo evitar la maldición de la soja”), un país puede intentar evitar una apreciación de su moneda ante una fuerte entrada de dólares (en Argentina, en los últimos años, por tipo de cambio alto combinado con altos precios de las materias primas) comprando dólares con superávit fiscal (la forma más efectiva) o comprando dólares con emisión monetaria (la forma menos efectiva, ya que genera inflación). El Gobierno Nacional decidió esta última alternativa. Por eso tenemos inflación.
Es cierto que en realidad esta misma política fue seguida durante 2003 y 2004 sin generar inflación, pero el contexto era distinto. Luego de la crisis financiera de 2001 y 2002, aumentó la demanda de dinero durante 2003 y 2004, con lo cual el BCRA podía comprar muchos dólares emitiendo pesos sin generar inflación ya que estos pesos eran demandados por el mercado. Calzada la oferta de dinero con su demanda, no había desequilibrio monetario que se ajustara con inflación. Desde 2005 la demanda de dinero comenzó a crecer a un ritmo más bajo, acompañando el ritmo de crecimiento de la actividad económica, con lo cual la misma política de emisión monetaria para comprar dólares y sostener el tipo de cambio pasó a generar un exceso de oferta de dinero, que se ajustó con inflación.
Y desde 2010 se agregó otra causa de emisión monetaria: la emisión para transferir fondos del BCRA al Tesoro, bajo la forma de transferencias de utilidades del BCRA. Esta emisión de dinero, que en los últimos 12 meses hasta el 29 de octubre implicó un aumento del 30% en la Base Monetaria (los pesos en circulación más las reservas de los bancos en el BCRA) y del 27.9% en el agregado monetario M2 (la Base Monetaria más los depósitos en pesos a la vista y en caja de ahorro), explica porqué los precios subieron 25.7% en igual periodo. Es la consecuencia de un mix de política económica (políticas cambiaria, monetaria y fiscal) que genera inflación.
Una política anti-inflacionaria exitosa requiere desacelerar estos motores inflacionarios (además de coordinar expectativas y generar acuerdos de precios y salarios que acompañen la desaceleración, para que la actividad económica no sufra el impacto), algo que difícilmente esté en la agenda del Gobierno Nacional. No deberíamos esperar por lo tanto menor inflación durante 2011.

No hay comentarios:

Publicar un comentario