Un blog de economía para no economistas

"Ojalá te toque vivir tiempos interesantes", reza una maldición china. Los argentinos sufrimos la maldición de vivir en una economía "interesante". Por eso tenemos que saber más de economía que en otros países.

Para enfrentar la maldición de vivir en una economía "interesante", en este blog encontrarás comentarios, análisis y estadísticas sobre la economía argentina, sin jerga económica innecesaria ni tecnicismos, con rigurosidad analítica pero simpleza en la exposición.

viernes, 27 de diciembre de 2013

Los metalúrgicos y la presión impositiva

Los industriales metalúrgicos cordobeses se oponen a eventuales aumentos de impuestos, postura razonable teniendo en cuenta el aumento de la presión impositiva de los últimos años, que sólo logró la paradoja de un Estado grande, pero al mismo tiempo débil. 

En "El análisis económico del día", en La Voz del Interior. Click aquí.

jueves, 26 de diciembre de 2013

Economía Para No Economistas TV. La amenaza de las cuasimonedas.

El mensaje del Gobernador de Corrientes destinado al Gobierno Nacional, referido a las cuasimonedas. En la edición de esta mañana de Economía Para No Economistas TV, por Canal 12 de Córdoba.

martes, 24 de diciembre de 2013

Un acuerdo de precios con pocas chances de éxito

Los acuerdos de precios tienen sentido sólo en el marco de un plan anti-inflacionario que combine, de manera complementaria y equilibrada, políticas macroeconómicas con políticas de ingresos. En “El análisis económico del día”, en La Voz del Interior. Click aquí

Economía Para No Economistas TV. El acuerdo de precios.

El acuerdo de precios del Gobierno Nacional, con pocas chances de éxito. En la edición de esta mañana de Economía Para No Economistas TV, por Canal 12 de Córdoba.

lunes, 23 de diciembre de 2013

El BCRA, pedaleando en una bicicleta fija

El Banco Central acelera el ritmo de suba del tipo de cambio oficial. Pero la competitividad cambiaria no mejora. En “El análisis económico del día”, en La Voz del Interior. Click aquí.

jueves, 19 de diciembre de 2013

Economía Para No Economistas TV. La aceleración de la inflación.

La inflación fue alta en octubre y noviembre. Esto hace caer el poder adquisitivo de los salarios, y anticipa mayores pedidos de aumentos salariales el año próximo.

El análisis, en la edición de esta mañana de Economía Para No Economistas TV, por Canal 12 de Córdoba.

miércoles, 18 de diciembre de 2013

Economía Para No Economistas TV

El BCRA acelera sólo para permanecer en el mismo lugar. En la edición de ayer de Economía Para No Economistas TV, por Canal 12 de Córdoba.

Un triste déjà vu

Al Gobierno Nacional le quedan dos años de mandato, con menos capital político por haber perdido las elecciones legislativas de este año, luego de una gran elección dos años atrás. La economía cierra el año con un crecimiento menor al 3% y la inflación se aceleró durante el segundo semestre. Las reservas del BCRA cayeron con relación al nivel del año pasado. El dólar que pagan los ahorristas cotiza por encima del dólar que pagan importadores y cobran exportadores. Los servicios públicos son deficientes como consecuencia de insuficientes inversiones, a pesar del drenaje de fondos públicos destinado a cubrir tarifas artificialmente bajas. ¿Una descripción de finales de 2013? No. Una descripción del final de 1987. Que hoy podría ser un triste déjà vu.

Naturalmente, hay diferencias entre 1987 y 2013. La inflación en aquel entonces era más alta que la actual (llegaba al 10% mensual), pero la caída de reservas del BCRA era menor (casi 20%, frente al 30% del último año), al igual que la brecha cambiaria (casi 30% en 1987, frente a alrededor del 50% hoy). Ya había fracasado un plan anti-inflacionario que había sido exitoso en su comienzo (el Plan Austral), mientras que en 2013 todavía no hemos tenido un plan anti-inflacionario. El contexto internacional jugaba en contra, mientras que hoy todavía sigue jugando a favor.

Pero esta comparación debería hacernos reflexionar sobre el nivel de deterioro que ha sufrido la economía durante los últimos dos años, y en especial durante este año. Para estar atentos a las señales que dé el Gobierno Nacional acerca de la comprensión que tenga de los fenómenos económicos en curso, y de las políticas que diseñe para revertir esta situación. Para evitar que la “década ganada” termine, paradójicamente, igual que la “década perdida”.

martes, 10 de diciembre de 2013

Economía para No Economistas TV

La diferencia entre un Estado grande y un Estado fuerte, a raíz de la ausencia del Estado la semana pasada en Córdoba. En la edición de esta mañana de Economía para No Economistas, por Canal 12 de Córdoba.


jueves, 5 de diciembre de 2013

La ausencia del Estado

Los saqueos de diciembre de 2001 en distintos lugares del país fueron consecuencia de una situación social crítica, que desbordó al Estado, concretamente, a las fuerzas de seguridad. Los saqueos del martes y miércoles en la ciudad de Córdoba, aun cuando pueda haber por debajo de la superficie un componente social delicado, fueron consecuencia de la ausencia del Estado, a nivel provincial por el auto-acuartelamiento de la policía y la falta de previsión del Gobierno Provincial (el Jefe de Gabinete provincial reconoció que puede haber habido una falta de dimensionamiento del problema, y es claro que no hubo pedido formal de asistencia de Gendarmería durante el martes, cuando la policía ya se había retirado de las calles de Córdoba), y a nivel nacional por la actitud del Jefe de Gabinete nacional, que el miércoles por la mañana ya sabía lo que había ocurrido durante la noche en Córdoba, y sabía también de los pedidos de auxilio (formales o informales) del Gobierno provincial, y dijo expresamente que Córdoba se tenía que hacer responsable por la situación. Aun con problemas de comunicación entre ambos niveles de gobierno, Capitanich explicitó la postura de escarmiento político para Córdoba.

Es paradójico que tengamos un problema de ausencia del Estado de esta magnitud, cuando el discurso político predominante es el de la reconstrucción de un Estado fuerte. Tal paradoja surge de la confusión que existe todavía en Argentina entre un Estado fuerte y un Estado grande. Y son dos cosas muy distintas. Un Estado fuerte es el que puede cumplir con sus obligaciones básicas, garantizando la seguridad, la justicia, la salud y la educación, independientemente de su tamaño. Un Estado grande, no necesariamente es fuerte, ya que puede ser grande y no cumplir con sus obligaciones básicas. Un Estado grande puede gastar en empresas estatales ineficientes, en publicidad de propaganda del Gobierno, en subsidios para ciudadanos que no los necesitan, en obras públicas con sobreprecios, y en mil cosas más que no garantizan la fortaleza del Estado. Un ejemplo bien concreto, de estos días: Argentina asigna recursos públicos a la educación en una magnitud inédita en su historia, y las pruebas internacionales de calidad educativa no hacen más que mostrar una caída, no sólo con relación a los países desarrollados, sino también en comparación con nuestros vecinos latinoamericanos. El tamaño del Estado suele estar desligado de su fortaleza.

Pero la ineficiencia no es la única culpable de un Estado grande pero débil. También incide la mezquindad política con que se administren los recursos públicos. Usar a los ciudadanos de Córdoba para pasar facturas políticas es un ejemplo concreto, y lamentable, de este segundo modo de transformar un Estado grande en un Estado débil, que no puede garantizar una de sus funciones básicas.

Argentina tiene claramente un Estado grande pero débil, en todos sus niveles de Gobierno. El peso del Estado en la economía, medido tanto a través de sus gastos como de sus ingresos, en proporción al tamaño de la economía, no ha hecho más que crecer en los últimos años. Esto se refleja en la presión impositiva tanto nacional, como de las provincias y los municipios, que creció por distintos mecanismos durante los últimos años, y seguirá creciendo durante el próximo. La Nación aprovecha la inflación para cobrar más impuestos usando parámetros impositivos que no se ajustan por inflación (lo que ocurre con el Impuesto a las Ganancias, tanto de trabajadores, como de autónomos y empresas); la Provincia lo hace creando nuevos tributos, como la Tasa Vial; el Municipio, nuevamente, lo hace subiendo alícuotas de la Contribución sobre Comercio e Industria. El Estado sigue absorbiendo fondos del sector privado, pero por ineficiencia y mezquindad política, sigue sin lograr generar un Estado fuerte.

Pero a aquel otro motivo para los saqueos, del tipo que ocurrió en 2001, ligado a situaciones sociales críticas, no hay que descuidarlo. La pobreza se mantuvo en los últimos años en niveles elevados, y la menor creación de empleo de los últimos meses, sumada a salarios que ya no le ganan a la inflación, pueden comenzar a generar situaciones sociales delicadas. Tal vez por eso hoy muchos gobiernos provinciales y municipales están preocupándose por lo que pueda ocurrir a finales de este mes, en época de fiestas. Esperemos que el Estado no vuelva a ausentarse.

Economía para No Economistas TV

Segunda edición del ciclo Economía para No Economistas TV, que salió al aire esta mañana en Canal 12 de Córdoba, en la segunda hora de Arriba Córdoba.


miércoles, 4 de diciembre de 2013

Análisis económico en Punto a Punto

El viernes pasado se realizó el último Desayuno de Coyuntura Económica del año con Punto a Punto. A continuación, la cobertura en la edición de esta semana.

martes, 3 de diciembre de 2013

Economía para No Economistas TV

Desde hoy, todos los martes y jueves, en la segunda hora de Arriba Córdoba, por Canal 12 de Córdoba, el ciclo Economía para No Economistas.

Aquí el primer micro, que salió al aire esta mañana:

lunes, 2 de diciembre de 2013

El cambio de rumbo económico del Gobierno Nacional

Acuerdo con Repsol, acuerdo con las empresas que ganaron juicios en el CIADI del Banco Mundial, acercamiento al Fondo Monetario Internacional y seguramente negociación con el Club de París por la deuda pendiente de pago con los países que lo integran. Se trata de medidas difíciles de anticipar tan sólo algunos meses atrás, en el marco de la política de “desendeudamiento”, que consistía en pagar vencimientos de deuda pública con reservas del BCRA, y en el marco del discurso sobre la “profundización del modelo”.

Seguramente no se trata de un viraje ideológico, sino de la reacción del Gobierno Nacional ante las restricciones que impone la realidad económica. Concretamente, la política de “desendeudamiento”, aún discutible, era viable en épocas de Néstor Kirchner, cuando el BCRA tenía reservas excedentes (más reservas que dinero en circulación) y, además, crecientes (el BCRA compraba dólares para evitar la caída del tipo de cambio), pero desde hace tiempo es inviable, en un contexto de fuerte caída de reservas. Y, en el caso concreto de YPF, la realidad mostró al Gobierno Nacional que sin financiamiento externo no es posible explorar los yacimientos de gas y petróleo no convencional de Vaca Muerta, y ese financiamiento externo no es viable sin acordar con Repsol el pago por la expropiación de sus acciones en YPF.

Desde el punto de vista de la discusión política, el cambio de rumbo genera fuertes críticas al Gobierno, en especial al Ministro de Economía Kicillof, que un año y medio atrás planteaba públicamente que Repsol no recibiría un solo peso por sus acciones en YPF y hoy acuerda un pago de alrededor de u$s 5,000 millones. Desde el punto de vista estrictamente económico, el cambio de rumbo probablemente refleje que el Gobierno Nacional no está dispuesto a acelerar a fondo hacia el abismo, como hoy vemos en la Venezuela de Nicolás Maduro.

De todos modos, esto no significa un viraje hacia políticas neoliberales (el “jarabe rancio del neoliberalismo”, dijo hoy Kicillof), ya que la lógica intervencionista seguramente continuará a partir del análisis de rentabilidad de las distintas cadenas de valor (lo anunciado por el Jefe de Gabinete Capitanich) para incidir en los aumentos de precios de cada sector, y de la utilización, tal vez con algo más de racionalidad, de los instrumentos de control de las importaciones heredados de Moreno.

Y en el frente inflacionario, las señales son de un enfoque “heterodoxo” de política anti-inflacionaria, que combina techo a los aumentos salariales y acuerdos de precios con empresas (lo que suele denominarse “políticas de ingresos”) y moderación fiscal y de emisión monetaria a partir de reducción de subsidios (lo que suele denominarse “políticas macroeconómicas”). Un enfoque conceptualmente correcto pero que enfrenta el desafío de cómo convencer a los sindicatos de que acepten aumentos salariales menores que este año y el interrogante de cuánta decisión habrá para enfrentar los costos políticos de subas de tarifas como consecuencia de la reducción de subsidios.

Se trata de desafíos e interrogantes importantes, ya que la historia económica argentina está plagada de planes anti-inflacionarios que fracasaron por no prestar debida atención a la aplicación complementaria y equilibrada de ambos tipos de política: las políticas macroeconómicas y las políticas de ingresos.