Un blog de economía para no economistas

"Ojalá te toque vivir tiempos interesantes", reza una maldición china. Los argentinos sufrimos la maldición de vivir en una economía "interesante". Por eso tenemos que saber más de economía que en otros países.

Para enfrentar la maldición de vivir en una economía "interesante", en este blog encontrarás comentarios, análisis y estadísticas sobre la economía argentina, sin jerga económica innecesaria ni tecnicismos, con rigurosidad analítica pero simpleza en la exposición.

jueves, 30 de mayo de 2013

Las perspectivas del sector inmobiliario

En el dossier sobre el sector inmobiliario, Punto a Punto publicó esta semana una entrevista que me hizo sobre las perspectivas del sector. Fue antes del proyecto de blanqueo de dólares y los CEDIN, pero de todos modos ya escribí bastante sobre ese tema.

Aquí la nota.

Análisis económico en el desayuno de Punto a Punto

El viernes 24, en el Desayuno de Coyuntura Económica de Punto a Punto analizamos, como siempre, varios temas importantes. En especial, el posible efecto de los CEDIN del blanqueo de dólares, la posibilidad de un esquema de tipos de cambio múltiples y el problema de la inflación, y cómo bajarla.


A continuación, la cobertura que hizo Punto a Punto de ese desayuno.

martes, 28 de mayo de 2013

La falacia de los mercados concentrados como culpables de la inflación

Dos novedades de los últimos días referidas a la política anti-inflacionaria del Gobierno Nacional. La primera es que, a través de distintas decisiones y mensajes que está transmitiendo a la sociedad, está reconociendo el problema de la elevada inflación. La segunda es que está explicitando cuál será la estrategia anti-inflacionaria, al menos hasta octubre: instalar la idea de que la culpa de la inflación es de los empresarios, con el mensaje de que son los empresarios quienes suben los precios, no el Gobierno, y actuar en consecuencia, impulsando controles en los comercios, que serán llevados a cabo por militantes y organizaciones sociales.

El mensaje de que los precios suben porque son los empresarios y comerciantes quienes toman decisiones de precios puede parecer razonable, porque los precios no suben por decisiones directas del Gobierno (excepto precios que sí maneja directamente, como los precios de los combustibles de YPF), sino por decisiones directas de empresarios y comerciantes. Pero es un análisis equivocado, porque los empresarios y comerciantes suben precios de manera generalizada justamente cuando están en medio de un proceso inflacionario, es decir, de un fenómeno macroeconómico en el cual el promedio de los precios sube mes a mes como consecuencia de políticas económicas que generan inflación. En otras palabras, el fenómeno de la inflación es de índole macroeconómica (ajeno a las decisiones individuales de empresarios y comerciantes), aunque al mirar las decisiones individuales se observen decisiones empresarias de subas de precios.

Un argumento del Gobierno que volverá a tomar fuerza es que las decisiones empresarias de subas de precios como consecuencia de la inflación, y no como su causa, sólo ocurren en las empresas pequeñas, que no tienen poder de mercado para fijar precios. Y que, por el contrario, son los sectores “concentrados” de la economía (sectores con poca competencia, formadores de precios) quienes aumentan los precios y generan presiones inflacionarias, a las cuales reaccionan los pequeños empresarios. Esto también parece razonable, pero también es equivocado.

En primer lugar, los empresarios que tienen poca o nula competencia (en el extremo, un monopolista) efectivamente tienen cierto poder de mercado para fijar sus precios. Pero no fijan cualquier precio, sino el precio que más les convenga. Pero si efectivamente tienen poder de mercado, no hay nada que les impida fijar ese precio óptimo, por encima del cual ya no tiene sentido que fijen sus precios ya que saben que sería mayor lo que perderían por menores ventas que lo que ganarían por cobrar cada unidad más cara. Esto significa que la existencia de mercados con poca competencia explica por qué los precios son, en esos mercados, mayores de lo que serían en un contexto de fuerte competencia, pero no explica por qué los precios suben sistemáticamente, y esa es la característica central de la inflación: subas sostenidas y sistemáticas de precios. Mercados concentrados explican entonces que los precios sean altos (el nivel de precios), no que suban sistemáticamente (las variaciones de los precios).

En segundo lugar, si la culpa de la inflación la tienen los empresarios, ¿por qué, con los mismos empresarios, en los 90 no había inflación y hoy sí? Más aún, con los mismos empresarios, ¿por qué en 2003 y 2004 la inflación fue muy baja, de un solo dígito, y hoy es de dos dígitos, aun en las estadísticas oficiales?

En tercer lugar, si la culpa de la inflación es de los empresarios, ¿por qué Brasil, Chile, México y prácticamente la totalidad de los países del mundo tienen baja inflación? ¿Nuestros empresarios son más voraces que en el resto del mundo? ¿Tenemos en Argentina más grupos concentrados que el resto del mundo?

En ningún país se genera inflación alta porque los empresarios quieran ganar más (en todo el mundo los empresarios quieren ganar todo lo que puedan), ni porque existan mercados concentrados (en todo el mundo los hay). En cualquier país se genera inflación cuando se ejecutan políticas económicas inflacionarias, como aumentar la cantidad de dinero en 30% o 40%, o aumentar el gasto público en magnitudes similares. Y una vez que la inflación es alta, comienzan a operar otros factores, como las pujas distributivas, los mecanismos de indexación por expectativas, entre otros.

De tal forma que realizar controles sobre comercios y empresas individuales, una medida “microeconómica”, no solucionará un problema “macroeconómico”, como lo es el de la inflación. Lo que sí lograrán esos controles es pérdida de rentabilidad en los comercios que no puedan subir suficientemente sus precios, en un contexto de aumento de sus costos, y problemas de desabastecimiento cuando la pérdida de rentabilidad no pueda ser “aguantada” por los comercios involucrados. Pero las presiones inflacionarias continuarán mientras continúen las políticas económicas que le dieron lugar.


Un análisis más detallado de la falacia de los mercados concentrados como causantes de inflación, en mi libro La Inflación – Cómo comprender y combatir la enfermedad crónica de la Argentina, de editorial EDICON – Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

lunes, 13 de mayo de 2013

Cómo analizar el polémico blanqueo de dólares

El proyecto de “blanqueo” de dólares enviado al Congreso tiene muchas aristas para el análisis. El desincentivo a pagar impuestos cuando a quienes no pagan se los recibe con los brazos abiertos, sin siquiera cobrarles impuesto al cheque. El peligro de terminar permitiendo, junto con el blanqueo impositivo, el lavado de dinero proveniente de actividades criminales. La enorme contradicción de pesificar primero la economía, para acabar con el uso del dólar para atesoramiento y compra de inmuebles, y terminar creando instrumentos financieros en dólares, no sólo para permitir el atesorando de dólares, sino también para comprar inmuebles e incluso para cancelar otro tipo de obligaciones en dólares. La gran dificultad del equipo económico para explicar el funcionamiento, los alcances y las implicancias del esquema propuesto. Lo inoportuno de anunciar un blanqueo de estas características en medio de graves denuncias de dinero negro vinculado al Poder. Entre muchos aspectos más.

El instrumento más controvertido e incomprendido, incluso por economistas y los propios funcionarios del gabinete económico, es el de los CEDIN, certificados a emitir por el BCRA que servirán para la compra de inmuebles. El sentido común indica que podría servir para impulsar el sector inmobiliario y reducir el dólar paralelo. La realidad es que difícilmente lo logre.

Para clarificar este importante punto, es útil un simple ejemplo. El individuo A tiene dólares en negro, y decide aprovechar el nuevo esquema para blanquearlos. Entrega 100 dólares al BCRA y recibe un CEDIN por 100 dólares. En caso de que quiera continuar atesorando dólares, en lugar de adquirir un inmueble, algo que seguramente ocurrirá en muchos casos (después de todo, ya optó por atesorar dólares), puede vender el CEDIN a un desarrollista por, digamos, 90 dólares. El desarrollista entrega luego el CEDIN al BCRA y recibe 100 dólares. Puede hacerlo porque tiene operaciones inmobiliarias (se dedica justamente a eso), de tal modo que puede justificar al BCRA que tiene CEDIN en su poder porque realizó una operación inmobiliaria (cuán fácil o complejo sea hacerlo dependerá de la reglamentación de la ley que haga el BCRA).

En este ejemplo, la persona A habrá blanqueado 100 dólares a un costo de 10 dólares (entregó 100 dólares negros y se llevó 90 dólares blancos); el desarrollista habrá hecho una diferencia de 10 dólares (entregó 90 dólares a la persona A y recibió 100 dólares del BCRA); el BCRA habrá aumentado transitoriamente sus reservas en 100 dólares entre el momento de la emisión del CEDIN y el momento en que lo rescata al final del proceso, a pedido del desarrollista. Pero no se habrá vendido ningún inmueble adicional, con lo cual no habrá generado impacto sobre el sector de la construcción, ni habrá inyectado dólares al mercado paralelo, con lo cual no habrá impactado sobre su cotización.

Siguiendo con el ejemplo, si apareciera una persona B que desee comprar con pesos el CEDIN a la persona A, reducirá la demanda de dólares en el mercado paralelo, pero será la persona A quien tendrá que recurrir al mercado paralelo para hacerse de los dólares que desea atesorar, con lo cual la demanda del paralelo quedará igual, y por lo tanto no habrá baja de la cotización del dólar paralelo. Además, la persona A probablemente no querrá recibir pesos, sino dólares, con lo cual será la persona B la que tendrá que ir al paralelo.

La clave del ejemplo es que mientras la persona que blanquea desee continuar posicionada en dólares, no cambiará nada en el mercado inmobiliario, ni tampoco en el mercado del dólar paralelo. Sólo impactará sobre ambos mercados cuando quiera quedarse con un inmueble de primera mano, en cuyo caso el CEDIN terminará en algún desarrollista que luego necesitará vender sus dólares en el mercado paralelo para obtener los pesos necesarios para pagar materiales y salarios. Sólo en ese caso aumentará la venta de inmuebles de primera mano y caerá algo la cotización del dólar paralelo. Pero es de esperar que la decisión de blanquear vía inmuebles sea tomada por una fracción de quienes blanqueen sus dólares vía CEDIN. Ni hablar si quien va a blanquear, en lugar de dólares tiene pesos, en cuyo caso tendrá que comprar previamente los dólares en el mercado paralelo, y por lo tanto aumentará la demanda de dólares en lugar de bajarla.

De tal modo que es difícil que la motivación original para crear los CEDIN haya sido la de impulsar el mercado inmobiliario y bajar el dólar paralelo (y si esa fue la motivación, se creó un instrumento poco efectivo para lograrlo). Es más probable que la motivación haya sido canalizar dólares hacia las reservas del BCRA, al menos transitoriamente, mientras los CEDIN están circulando por la economía. Y de esa forma reponer al menos parte de los 2,000 millones de dólares de reservas del BCRA que se destinarán a financiar a YPF. Con lo cual tal vez la clave para comprender todo el blanqueo sea tener en cuenta que puede servir para morigerar el gran problema que se compró el gobierno al confiscar YPF: cómo financiarla. Con los nuevos bonos que rinden el 4% en dólares lo logra directamente, mientras que con el CEDIN lo hace indirectamente, reponiendo las reservas que use para financiar a YPF.

Con tanta complejidad, que incluso está confundiendo a economistas y a los propios funcionarios, no es extraño que haya tanta confusión entre el resto de la población.


Para seguir este análisis en formatos de video y de audio, Economía en 5 Minutos en www.economictrends.com.ar

viernes, 10 de mayo de 2013

Mi tercer libro: La Inflación

Este fin de semana sale mi tercer libro: La Inflación: Cómo comprender y combatir la enfermedad crónica de la Argentina, nuevamente con Editorial EDICON, del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Los 70 años de alta inflación deberían habernos convertido, a los argentinos, en expertos sobre esta enfermedad anacrónica, prácticamente erradicada en todo el mundo. Y sin embargo seguimos discutiendo el tema con argumentos equivocados. Por ejemplo, el convencimiento general, entre gobiernos y opositores, de que para bajar la inflación es necesario frenar la economía y aumentar el desempleo. Equivocación muy perjudicial, porque genera pocos incentivos para intentar curar esta enfermedad, tratando de evitar la supuesta medicina amarga de la recesión.

Por eso el libro. Para aportar un granito de arena en el importante debate sobre qué tendrán que tener en cuenta quienes aspiren a gobernar el país a partir de 2015.


miércoles, 8 de mayo de 2013

La clave para comprender el “blanqueo”: YPF

Pocas veces hemos tenido medidas de política económica tan contradictorias como la anunciada ayer. El principal problema de estos días es el dólar paralelo, que crece sin parar, con gran impacto negativo sobre la actividad económica y las expectativas, y se anuncia una medida que no tiene nada que ver con ese problema. De hecho, no aumentará la oferta de dólares en el mercado paralelo, ni reducirá la demanda. Por el contrario, hasta puede incrementar la demanda de dólares paralelos si a algunos “blanqueadores” se les ocurre blanquear pesos, yendo al mercado paralelo a comprar los dólares necesarios para la operación.

La gran política económica del año pasado fue la pesificación de la economía. El discurso oficial es que se acabó la “manía” argentina de utilizar dólares para ahorrar o para comprar inmuebles. Y, en lugar de crear instrumentos financieros en pesos, la medida anunciada ayer crea instrumentos ¡en dólares! Uno de los cuales sirve para comprar inmuebles ¡en dólares! Y encima fondos provenientes de quienes lograron escapar a las restricciones impuestas por el Gobierno, fugando dólares.

La clave para comprender una medida tan contradictoria tiene tres letras: YPF. El Gobierno Nacional se compró un gran problema al expropiar (en realidad, confiscar) las acciones de Repsol en YPF: cómo financiar a la petrolera, cuando ya está claro que no resulta fácil atraer inversores externos. Y encima, con la escapada del dólar paralelo, perdieron atractivo las colocaciones de YPF en pesos. Todo esto en el marco de la menor capacidad de producción de YPF por el incendio de la refinería de Ensenada.

En este contexto, el objetivo es “matar dos pájaros de un tiro”. Con el título que absorbe dólares para depositarlos en el BCRA (disfrazado de instrumento para movilizar el mercado inmobiliario) repone las reservas que tome para financiar a YPF (ya había anunciado la utilización de u$s 2,000 millones). Y con el otro bono, el que rinde un interés anual del 4%, inyecta dólares en YPF.

Dado que esta medida no ataca los problemas centrales de la inflación y la suba del dólar paralelo, y encima da señales confusas y contradictorias, seguirán profundizándose los problemas económicos.

viernes, 3 de mayo de 2013

Análisis económico en el desayuno de Punto a Punto

El viernes pasado compartí mi análisis de las perspectivas económicas con los empresarios convocados por Punto a Punto, en el marco del Ciclo de Desayunos de Coyuntura Económica. Aquí una síntesis de lo que dije ese día.