Al Gobierno Nacional le quedan dos años de mandato, con menos capital
político por haber perdido las elecciones legislativas de este año, luego de
una gran elección dos años atrás. La economía cierra el año con un crecimiento
menor al 3% y la inflación se aceleró durante el segundo semestre. Las reservas
del BCRA cayeron con relación al nivel del año pasado. El dólar que pagan los
ahorristas cotiza por encima del dólar que pagan importadores y cobran
exportadores. Los servicios públicos son deficientes como consecuencia de insuficientes inversiones, a pesar del
drenaje de fondos públicos destinado a cubrir tarifas artificialmente bajas. ¿Una
descripción de finales de 2013? No. Una descripción del final de 1987. Que hoy
podría ser un triste déjà vu.
Naturalmente, hay diferencias entre 1987 y 2013. La inflación en aquel
entonces era más alta que la actual (llegaba al 10% mensual), pero la caída de
reservas del BCRA era menor (casi 20%, frente al 30% del último año), al igual
que la brecha cambiaria (casi 30% en 1987, frente a alrededor del 50% hoy). Ya
había fracasado un plan anti-inflacionario que había sido exitoso en su
comienzo (el Plan Austral), mientras que en 2013 todavía no hemos tenido un
plan anti-inflacionario. El contexto internacional jugaba en contra, mientras
que hoy todavía sigue jugando a favor.
Pero esta comparación debería hacernos reflexionar sobre el nivel de
deterioro que ha sufrido la economía durante los últimos dos años, y en
especial durante este año. Para estar atentos a las señales que dé el Gobierno
Nacional acerca de la comprensión que tenga de los fenómenos económicos en
curso, y de las políticas que diseñe para revertir esta situación. Para evitar que la “década ganada” termine,
paradójicamente, igual que la “década perdida”.
Hola Gastón, muy clarificador el análisis.
ResponderEliminarAdemás de la gran similitud con 1987; creo que somos la remake viviente de La Rebelión de Atlas de Ayn Rand. Me parece que hizo una descripción de la Argentina actual pero hace más de medio siglo. Slds y gracias